Cada vez más, surgen dudas en torno a si estas sustancias orgánicas son o no beneficiosas para nuestro organismo y, sobre todo cuando hablamos de cosmética, para nuestra piel.
Si bien es cierto que son sustancias que están aprobadas por autoridades sanitarias como la OCU, en el 90% de los casos los parabenos han sido sintetizados de forma artificial, lo cuál provoca su deterioro y condición de “orgánico”.
¿Por qué no son “recomendables”?
Como señalamos, la manipulación de los parabenos dan como resultado un producto artificial que, aunque sea muy bajo, tiene cierto grado de toxicidad.
La función de los parabenos no es más que la de ayudar a mantener un producto en buenas condiciones una vez ha sido abierto. Sus propiedades bactericidas y fungicidas ayudan a incrementar la durabilidad del producto y así evitar su deterioro, causado por microorganismos, hongos o bacterias.
Los parabenos más utilizados en cosmética responden al nombre de Methylparaben y ethylparaben o también Butylparaben y proylparaben, permitidos hasta el momento, pero siempre de forma moderada.
Lo cierto es, que estas sustancias también podemos encontrarlas en productos de higiene personal como desodorantes, cremas depilatorias e incluso en algunos alimentos como endulzantes, confitería o patés.
Sin parabenos, siempre en la etiqueta
Es importante diferenciar dos tipos de parabenos: orgánicos (presentes en frutas como los arándanos) que no presentan ningún problema porque se metabolizan de forma natural y los sintéticos, químicos y que se deben evitar.
En este sentido, hay que ser astutos. Aunque un producto contenga referencias como producto ecológico o natural, no determina que esté libre de parabenos si esto no está impreso en la etiqueta del producto.
Debemos ser conscientes de que todos los ingredientes que contenga un producto van a pasar por los tejidos de la piel y esto repercute más de lo que imaginamos en la salud.
Si bien es cierto que la cosmética natural tiene un precio algo más elevado que la convencional, los resultados son siempre beneficiosos a largo plazo y eso la piel lo agradece.
Comprometidos con la causa
En Atlantia apostamos por la cosmética natural, siendo todos nuestros productos libres de parabenos ni perfumes.
De esta forma, son aptos para todas las edades y tipos de piel al no causar ningún tipo de reacción alérgica ni otro tipo de afecciones.
Además, no están testados en animales, respetamos al medio ambiente y todos nuestros productos cumplen con los requisitos del comercio justo.